Visita de un teatro infantil....

El pasado 29 de enero tuvimos la excelente oportunidad de disfrutar de una obra de teatro infantil, para valorar como futuros maestros que somos si su contenido y estructura era adecuada para ser disfrutada por los más pequeños.Para eso, elegimos la llamada "El loco sueño de una noche de verano" una excelente obra de teatro que durante algo más de dos meses se pudo disfrutar en el teatro arenal de Madrid (Situado en la calle Arena a pocos metros de Sol)


“El loco sueño de una noche de verano” es una disparatada y cautivadora versión musical de “El sueño de una noche de verano”, de William Shakespeare. Una comedia musical creada para que tanto niños como mayores, disfruten de clásicos tan maravillosos como este. Un espectáculo lleno de color, música, sorpresas, magia y personajes fantásticos que salen de un libro gigantesco, cuyas páginas encierran una historia inolvidable, que no dejará de sorprender a toda la familia.


Y realmente su sinopsis se ciñe bastante bien a la realidad, los niños se introducen en mundo mágico gracias a ese gigantesco libro que ocupa todo el escenario y que en cada hoja cuenta con diferentes decorados donde se desarrollan las diferentes tramas que transcurren durante los casi 75 minutos que ocupa la obra.


Si hubiera que poner una pega, seria que quizás a veces existen parodias pensadas más bien para el público adulto, pero estaria justificado ya que de alguna manera tiene un enfoque familiar para que tambien los mayores puedan ser participes de la obras junto a sus hijos y pasarlo bien.








Con un número aproximado de 7 actores que repiten papeles con una enorme base para que su cambio de registro a veces incluso no te haga caer en que ves al mismo actor y un ritmo veloz en las tramas consiguen que el tiempo que dura la obra se haga ameno, entretenido e incluso corto.


Además durante un número destacable de veces se interactua con los más pequeños para que la participación de los mismos sea continua y haga que el público se adentre más en la historia como un personaje más.


Además al final de la historia a la salida los actores reciben a todos los niños para entregarles un pequeño regalo y así poder saludarles e incluso hacerse fotos con ellos, detalle que me pareció curioso y que culminó con más magia aún de la vivida durante la propia obra de teatro.


Sin duda, una buena alternativa de ocio para ser disfrutada en familia y para introducir a los pequeños en el mágico mundo de la lectura.


MUY RECOMENDABLE.

R. Muriel